Arquitectura de respeto

En la antigua Roma se creía que todos los lugares estaban custodiados por un espíritu protector que mantenía la armonía del espacio. Para nosotros el Genius loci es la idea de que la arquitectura de cada bodega y proyecto debe respetar el paisaje, integrando los edificios con el entorno físico, histórico y cultural del territorio.

Para hablar del origen de Aiurri nos tenemos que situar en Leza, una villa privilegiada en la que comarca de Rioja Alavesa capaz de emocionar por su entorno y su riqueza patrimonial, vitivinícola y cultural que conviven con vestigios de la Edad del Cobre.

Allí llegamos en al año 2020 con la idea de remodelar las antiguas instalaciones integradas en el centro histórico de Leza pero alejadas de la esencia propia del entorno. Dos edificios, unidos por un calado, que se han reformado por completo respetando y conservando la identidad patrimonial del municipio, minimizando el impacto con el paisaje a los pies de la Sierra de Toloño.

En la propuesta del departamento de Proyectos de Alma Carraovejas, dirigido por Elena Arranz y con la ayuda de ingeniería KREAN y de Construcciones Aikar Anaiak, se ha buscado mantener la estructura de las antiguas instalaciones y envolverlas con las nuevas construcciones, adaptadas el Genius loci del entorno, logrando una integración en el paisaje efectiva de toda la edificación.

Arquitectura de respeto e integración con el paisaje

Arquitectura de respeto: restructuración de espacios

El inmueble principal, que estaba divido en dos partes iguales, se ha unificado con un diseño y construcción que permite respetar al máximo los procesos de elaboración natural por gravedad y las características originales de la materia prima. Se mantienen las paredes gruesas de los antiguos edificios, que facilita las temperaturas frescas en la zona de elaboración durante los meses estivales.

Asimismo, se proyectan varias actuaciones en el interior cuidando con mimo cada detalle, como la creación de un espacio para los depósitos y pasarelas, sala de barricas a doble altura, la sala de tinas con la apertura de ventanales hacia la Sierra de Toloño y el acondicionamiento del calado que une los dos edificios.

En el sótano del segundo edificio, conectando con el túnel subterráneo aparece la sala destinada a la crianza en botella. La planta baja, que antes era un antiguo txoco o merendero se transforma en una zona reservada para oficinas, sala de catas, así como el laboratorio, la zona de embotellado y producto terminado.

Durante el diseño de la nueva bodega se ha buscado la integración con el uso de materiales nobles procedentes del entorno de Leza. Los materiales principales son la madera de roble, combinada con los tonos oscuros de las paredes y el acero inoxidable, así como algún toque de piedra de la zona en su interior. De esta manera se ha remodelado y acondicionado las fachas de ambos edificios, sustituyendo la piedra existente, por la piedra arenisca de la zona lo que ha dotado de identidad al inmueble unificándolo con resto de edificaciones del casco histórico.

El compromiso de Aiurri con la sostenibilidad también se refleja en la arquitectura de la nueva bodega, no solo con la reducción de emisiones al utilizar materiales propios de la zona, sino también con la instalación de energías renovables, en este caso aerotermia, que permite aprovechar el calor que existe en el aire para satisfacer las necesidades de calefacción, refrigeración y agua caliente sanitaria.

En todos lo pasos que se van dando la innovación y el uso de tecnologías avanzadas están presentes en la construcción de las nuevas instalaciones actuando como motor de desarrollo y progreso. Como por ejemplo, el sistema de control de frio y calor de todos los depósitos, la humidificación por syrus, un sistema que permite llegar a un 80% de humedad impulsando micro gotas de agua tan pequeñas que se evaporan y sin dejar rastro de agua, control de la iluminación para seguir con nuestra filosofía de trabajo apostando por la eficiencia energética, etc.

Unas instalaciones, integradas en el Genius loci de Leza y diseñadas para poder transmitir de la manera más honesta la singularidad de nuestros viñedos respetando la arquitectura del territorio.